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El educador profesional - Flipped Learning Open Course
An Open and Connected Course for Faculty Development

El educador profesional

--Originally published at Aprendizaje en acción

http://www.ididactic.com/edblog/flipped-classroom-certification-by-sophia/

Resulta innegable que para poder implementar el aula invertida, debemos considerarnos como un eje importante a partir del cual los estudiantes tendrán la oportunidad de vivir una experiencia diferente a través del flipped learning. Para ello resulta fundamental que el profesor cuente con características muy particulares, que permitan que este proceso se dé de manera más natural y con mayor efectividad.

Un profesor que se prepara, que estudia, que planea, no es suficiente; se necesita de un profesor apasionado, motivador, inspirador que sepa transmitir los conocimientos requeridos, pero también que guíe a los estudiantes.  En ocasiones cuesta mucho trabajar enganchar a los alumnos cuando tenemos clases presenciales, hacerlo de manera asincrónica puede ser todavía más retador, por lo que no bastará con conocer el tema, los objetivos, la planeación, etc.

Basta con recordar a nuestros profesores más entrañables, los que a nivel personal dejaron huella, regularmente son aquéllos que lograban “contagiar” su entusiasmo y amor por la materia que impartían, aquéllos que no solamente estaban preparados, también estaban comprometidos con sus estudiantes y nos hacían querer mejorar.  Ahora la educación ha cambiado, no podemos ser más como quienes nos dieron clases alguna vez, pero si podemos ser diferentes, estar actualizados y preparados, pero también estar conscientes de que los alumnos necesitan a un profesor retador, comprometido y apasionado de su trabajo.

Vale la pena intentar un poco de todo, todo buen esfuerzo siempre es premiado, así que es importante que como profesores nos preparemos en todos los sentidos con mayor dedicación.  Querer hacer las cosas como siempre, no es suficiente, ni es sano para nosotros y los estudiantes.

Aún a pesar de ello, en ocasiones resulta difícil porque existen alumnos completamente “renuentes” a la materia que se imparte, pero tal como menciona Watters en su análisis del Juramento Hipocrático http://hackeducation.com/2015/01/21/hippocratic-oath/, los estudiantes son seres humanos en toda la extensión de la palabra, y hay que pensar en ello cuando preparamos la clase, no podemos limitarnos a impartir contenidos poco aplicables que no tengan ningún sentido para ellos, es importante considerar que todos ellos tienen intereses, habilidades y competencias diferentes y por ende debemos diversificarnos para lograr los objetivos.

Talbert http://chronicle.com/blognetwork/castingoutnines/2015/01/22/three-evolving-thoughts-about-flipped-learning/ realiza también una serie de reflexiones interesantes que de manera personal puedo traducir como: contenidos instruccionales vs generación de preguntas de reflexión; calificaciones vs aprendizaje significativo, trabajos vs actividades retadoras que involucren a la lectura.  Es claro el camino que debemos considerar, es importante enfocarnos en lo que es verdaderamente importante, y esto es el aprendizaje del alumno.

En éste último punto solo cabe una reflexión adicional, ¿qué sucede cuando como docentes queremos implementar actividades retadoras, pero la propia planeación institucional muchas veces no te deja ir más allá?, ¿qué sucede cuando como profesores queremos implementar actividades diferentes y el programa te exige evaluaciones sumativas?, el reto está en encontrar la manera de sortear los obstáculos, dentro y fuera del salón de clase. y como siempre… seguiremos aprendiendo.


El educador profesional