Flipped Learning Open Course. Unidad 4: El Docente Profesional

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Creo que en esta época se espera mucho más del docente que hace unas décadas. Además de que del docente siempre se ha esperado dedicación y entrega a sus estudiantes y a su profesión, con el auge de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC’s), se espera que el docente integre dichas tecnologías en su práctica. Así, el docente no solo debe conocer el funcionamiento de estas herramientas tecnológicas, sino que también debe saber hacer uso de ellas. Debe conocer un conjunto de teorías en educación y técnicas didácticas para poder implementarlas de manera eficiente y desarrollen un conjunto de competencias establecidas para las nuevas necesidades de este siglo XXI.

En otras palabras, se espera que el docente sea un Docente Profesional. Es decir:

• El docente tiene pasión por su trabajo.
• El docente es capaz de reconocer las necesidades de sus estudiantes y el mejor camino para satisfacer dichas necesidades.
• Se consideran a sí mismos aprendices de por vida.
• Hace que sus estudiantes se sientan parte del proceso de enseñanza aprendizaje.

Esto representa una gran inversión. Los docentes en mi escuela, como muchos otros alrededor del mundo, invertimos mucho tiempo y esfuerzo en preparar nuestras clases. Diseñamos la estrategia adecuada para cada contenido de nuestros cursos y las adaptamos conforme avanzamos, de acuerdo a las necesidades o retos que surjan en el aula con nuestros alumnos para asegurarnos que se dé el aprendizaje. También contemplamos la mejor herramienta tecnológica que apoye el proceso de enseñanza-aprendizaje. Después, diseñamos la mejor técnica para evaluar de manera formativa a nuestros estudiantes para asegurarnos que han comprendido los contenidos de nuestros cursos.

Fuera del aula, brindamos ayuda extra al estudiante con sesiones de asesorías. Detectamos a los alumnos que no han comprendido los contenidos, que tienen dificultad para comprender algún tema y los citamos en las tardes después de clases para apoyarlos. En mi caso, yo brindo asesorías no sólo a mis estudiantes, sino también a estudiantes de otros profesores que, por alguna circunstancia, no pueden asistir a estas asesorías con sus profesores o necesitan apoyo adicional.

Creo que todos los docentes en mi escuela hacen todo esto, y aún más, debido a que los mueve la pasión y el amor por su trabajo. Son dedicados. Es su vocación.