--Originally published at Coding with jared
El último día de clases oficialmente fue el jueves 3 de mayo, sin embargo siempre al final de cada semestre se acumula la tensión y estrés debido a los proyectos finales, exámenes y otros pendientes que los estudiantes puedan tener, no solo escolares si no también familiares o incluso personales, en una edad todavía crítica para la vida, combinando todos estos “problemas” pueden ser útiles de manera constructiva o negativos en la búsqueda de identidad personal y como desea ser un futuro no lejano. En fin, regresando a lo escolar, las dos o quizá tres últimas semanas de clases son las más pesadas y más para el estudiante mexicano promedio que suele procrastinar bastante, a pesar de que está característica esté escrita en mi ADN, he intentado cambiar mi actitud en los últimos años y durante este semestre i creo que puedo decir he mejorado un poco más la manera en que me administro. No solo uno es más consiente de esto mientras va creciendo, sino también le sirven los consejos y buenos hábitos de las demás personas.
El tiempo pasó demasiado rápido este semestre, quizá el más rápido de todos debido a los puentes, días festivos, etc. Junto a este tiempo también se llevó a cabo la lectura completa de Tom DeMarco Deadline, la cual a pesar de haber sido una novela (incluyendo drama, acción y romance) tiene unos puntos clave muy sólidos en cuanto a la realización de proyectos, tareas o cualquier meta que se quiera proponer una persona, a pesar de que el libro fue publicado por vez primera en 1997, hay consejos, teorías y maneras estratégicas de manejar aspiraciones que todavía aplican muy bien para el 2018, aunque si pueda haber algún contexto histórico grabado en el libro el cual no se mantiene muy bien la actualidad, gracias al avance exponencial (aunque no ha sido tan exponencial en los últimos años) de las dos últimas décadas. Si tuviera que quedarme o mencionar mi mayor aprendizaje sobre Deadline sería que uno no puedo hacer todas las cosas solo, siempre se necesita de ayuda, ya sea de expertos en el tema o departamento en específico, ayuda emocional, puntos de vista desde otra perspectiva, siempre estar abierto a distintas opiniones, nunca encerrarse con una manera de pensar, y que como dice Ken Bauer; “It´s okay to fail”, no hay mejor maestro que el error y no sentirse mal por los errores cometidos sino más comprometido en lograr el éxito, sin embargo en México y creo que también en la mayoría de Latinoamérica existe la cultura de que el error es algo digno de vergüenza y que de ser posible nunca debería ser mencionado, pero en otros lados; el más claro ejemplo es Silicon Valley, a la gente le encanta presumir de sus errores a los demás, ya que saben que los errores son progreso y no deshonra.
Otra cosa que me gustaría mencionar en este blog es lo que me gustaría que fuera del Semestre I para futuras generaciones de la carrera ITE. Para empezar al igual que mis compañeros han mencionado por las últimas semanas sería la ayuda constante del socio formador, quizá cada dos semanas una revisión mediante una llamada en línea o quizá una junta presencial para contarles nuestros avances, errores, y sobre todo recibir feedback de alguien que es experto en el tema. Quizá también unas tres juntas a lo largo del semestre parecidas a la que tuvimos el lunes 23 a las 8.30, una junta donde no solo los estudiantes puedan expresar como se sienten que sienten que les hace falta por mejorar, que le es inquieta, pero no solo para ellos sino también para los maestros involucrados y el socio formado, quizá no sea la mejor manera estar todos al mismo tiempo, porque quizá como vimos en el libro; las juntas con grades personas suelen ser un desperdicio de tiempo (puede que no para un grupo como el de nosotros que en total seríamos alrededor de 30 personas), pero para los grupos donde los semestre I suelen tener muchísima más gente a lo mejor no es lo ideal. Otro punto que me gustaría se desarrollará y se le diera mayor énfasis sería las presentaciones formales ejecutivas donde tienes que vender tu idea o proyecto a las empresas. Estuvo buena la idea de meternos dos clases con el maestro Juan Carlos Pineda, puesto que aprendimos cosas que normalmente no se ven en clase como como funciona un crédito bancario, intereses simples y compuestos, además de recomendarnos lecturas para informarnos sobre lo básico de investments.
Por último, me gustaría mencionar que la necesidad de adaptarse a cambios o salir de la zona de confort, siento que es totalmente bueno, agrega un reto o le añade sabor a la vida diaria. ¿Qué chiste tiene vivir si todo se me otorga de la manera que quiero, o que las cosas salgan como las planeé, o quizá que un imprevisto salga de la nada? Vuelvo a repetir en esta publicación que lo mismo pasó con este Semestre i, aunque no fue lo que todos tuvimos de expectativa en un principio, debemos de ser capaces de rescatar lo positivo de lo negativo, llevarnos eso como experiencia y tener una actitud colaborativa, nunca de reclamo de una manera que no sea constructiva. Después de varios semestres en el Tec, creo que uno se va dando cuenta de esto poco a poco, siempre lidiando con situaciones que se presenten, ya sean tareas, proyectos, exámenes, trabajo, servicio social, servicio becario, problemas familiares, problemas personales, situaciones de foráneos, actividades deportivas, actividades de grupos estudiantiles y demás cosas, todas estas generando en ciertas personas una idea borrosa del futuro que se aproxima cada vez más poco a poco. Al final creo que cada quien es responsable de qué manera percibir todas estas situaciones y de qué manera estas les afectan, ya sea motivándolos a ser mejores o a generar una sensación de miedo que puede crear cosas negativas como un bloqueo mental.
